54 Versículos de la Biblia sobre el Corazón

Proverbios 4:23

Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón;
Porque de él mana la vida.
Por sobre todas las cosas cuida tu corazón,
porque de él mana la vida.
Con toda diligencia guarda tu corazón,
porque de él brotan los manantiales de la vida.

Proverbios 27:19

Como en el agua el rostro corresponde al rostro,
Así el corazón del hombre al del hombre.
En el agua se refleja el rostro,
y en el corazón se refleja la persona.
Como el agua refleja el rostro,
así el corazón del hombre refleja al hombre.

Jeremías 17:9-10

Engañoso es el corazón más que todas las cosas,
y perverso; ¿quién lo conocerá?
Yo Jehová, que escudriño la mente,
que pruebo el corazón,
para dar a cada uno según su camino,
según el fruto de sus obras.
Nada hay tan engañoso como el corazón.
No tiene remedio.
¿Quién puede comprenderlo?
«Yo, el Señor, sondeo el corazón
y examino los pensamientos,
para darle a cada uno según sus acciones
y según el fruto de sus obras».
Más engañoso que todo, es el corazón,
y sin remedio;
¿quién lo comprenderá?
Yo, el Señor, escudriño el corazón,
pruebo los pensamientos,
para dar a cada uno según sus caminos,
según el fruto de sus obras.

1 Pedro 3:3-4

Vuestro atavío no sea el externo de peinados ostentosos, de adornos de oro o de vestidos lujosos, sino el interno, el del corazón, en el incorruptible ornato de un espíritu afable y apacible, que es de grande estima delante de Dios.
Que la belleza de ustedes no sea la externa, que consiste en adornos tales como peinados ostentosos, joyas de oro y vestidos lujosos. Que su belleza sea más bien la incorruptible, la que procede de lo íntimo del corazón y consiste en un espíritu suave y apacible. Esta sí que tiene mucho valor delante de Dios.
Y que vuestro adorno no sea externo: peinados ostentosos, joyas de oro o vestidos lujosos, sino que sea el yo interno, con el adorno incorruptible de un espíritu tierno y sereno, lo cual es precioso delante de Dios.

Jeremías 29:13

Y me buscaréis y me hallaréis, porque me buscaréis de todo vuestro corazón.
Me buscarán y me encontrarán cuando me busquen de todo corazón.
Me buscaréis y me encontraréis, cuando me busquéis de todo corazón.

Salmo 51:10

Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio,
Y renueva un espíritu recto dentro de mí.
Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio,
y renueva la firmeza de mi espíritu.
Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio,
y renueva un espíritu recto dentro de mí.

Salmo 20:4

Te dé conforme al deseo de tu corazón,
Y cumpla todo tu consejo.
Que te conceda lo que tu corazón desea;
que haga que se cumplan todos tus planes.
Que te conceda el deseo de tu corazón,
y cumpla todos tus anhelos.

1 Samuel 16:7

Y Jehová respondió a Samuel: No mires a su parecer, ni a lo grande de su estatura, porque yo lo desecho; porque Jehová no mira lo que mira el hombre; pues el hombre mira lo que está delante de sus ojos, pero Jehová mira el corazón.
Pero el Señor le dijo a Samuel: —No te dejes impresionar por su apariencia ni por su estatura, pues yo lo he rechazado. La gente se fija en las apariencias, pero yo me fijo en el corazón.
Pero el Señor dijo a Samuel: No mires a su apariencia, ni a lo alto de su estatura, porque lo he desechado; pues Dios ve no como el hombre ve, pues el hombre mira la apariencia exterior, pero el Señor mira el corazón.

Proverbios 3:5-6

Fíate de Jehová de todo tu corazón,
Y no te apoyes en tu propia prudencia.
Reconócelo en todos tus caminos,
Y él enderezará tus veredas.
Confía en el Señor de todo corazón,
y no en tu propia inteligencia.
Reconócelo en todos tus caminos,
y él allanará tus sendas.
Confía en el Señor con todo tu corazón,
y no te apoyes en tu propio entendimiento.
Reconócele en todos tus caminos,
y Él enderezará tus sendas.

Proverbios 3:3-4

Nunca se aparten de ti la misericordia y la verdad;
Atalas a tu cuello,
Escríbelas en la tabla de tu corazón;
Y hallarás gracia y buena opinión
Ante los ojos de Dios y de los hombres.
Que nunca te abandonen el amor y la verdad:
llévalos siempre alrededor de tu cuello
y escríbelos en el libro de tu corazón.
Contarás con el favor de Dios
y tendrás buena fama entre la gente.
La misericordia y la verdad nunca se aparten de ti;
átalas a tu cuello,
escríbelas en la tabla de tu corazón.
Así hallarás favor y buena estimación
ante los ojos de Dios y de los hombres.

Mateo 22:37

Jesús le dijo: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente.
“Ama al Señor tu Dios con todo tu corazón, con todo tu ser y con toda tu mente” —le respondió Jesús—.
Y Él le dijo: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente.

Mateo 6:21

Porque donde esté vuestro tesoro, allí estará también vuestro corazón.
Porque donde esté tu tesoro, allí estará también tu corazón.
Porque donde esté tu tesoro, allí estará también tu corazón.

Salmo 37:4

Deléitate asimismo en Jehová,
Y él te concederá las peticiones de tu corazón.
Deléitate en el Señor,
y él te concederá los deseos de tu corazón.
Pon tu delicia en el Señor,
y Él te dará las peticiones de tu corazón.

Ezequiel 36:26

Os daré corazón nuevo, y pondré espíritu nuevo dentro de vosotros; y quitaré de vuestra carne el corazón de piedra, y os daré un corazón de carne.
Les daré un nuevo corazón, y les infundiré un espíritu nuevo; les quitaré ese corazón de piedra que ahora tienen, y les pondré un corazón de carne.
Además, os daré un corazón nuevo y pondré un espíritu nuevo dentro de vosotros; quitaré de vuestra carne el corazón de piedra y os daré un corazón de carne.

Proverbios 17:22

El corazón alegre constituye buen remedio;
Mas el espíritu triste seca los huesos.
Gran remedio es el corazón alegre,
pero el ánimo decaído seca los huesos.
El corazón alegre es buena medicina,
pero el espíritu quebrantado seca los huesos.

Proverbios 3:1-2

Hijo mío, no te olvides de mi ley,
Y tu corazón guarde mis mandamientos;
Porque largura de días y años de vida
Y paz te aumentarán.
Hijo mío, no te olvides de mis enseñanzas;
más bien, guarda en tu corazón mis mandamientos.
Porque prolongarán tu vida muchos años
y te traerán prosperidad.
Hijo mío, no te olvides de mi enseñanza,
y tu corazón guarde mis mandamientos,
porque largura de días y años de vida
y paz te añadirán.

2 Corintios 9:7

Cada uno dé como propuso en su corazón: no con tristeza, ni por necesidad, porque Dios ama al dador alegre.
Cada uno debe dar según lo que haya decidido en su corazón, no de mala gana ni por obligación, porque Dios ama al que da con alegría.
Que cada uno dé como propuso en su corazón, no de mala gana ni por obligación, porque Dios ama al dador alegre.

Proverbios 10:8

El sabio de corazón recibirá los mandamientos;
Mas el necio de labios caerá.
El de sabio corazón acata las órdenes,
pero el necio y rezongón va camino al desastre.
El sabio de corazón aceptará mandatos,
mas el necio charlatán será derribado.

Salmo 147:3

El sana a los quebrantados de corazón,
Y venda sus heridas.
Restaura a los de corazón quebrantado
y cubre con vendas sus heridas.
Sana a los quebrantados de corazón,
y venda sus heridas.

Salmo 31:24

Esforzaos todos vosotros los que esperáis en Jehová,
Y tome aliento vuestro corazón.
Cobren ánimo y ármense de valor,
todos los que en el Señor esperan.
Esforzaos, y aliéntese vuestro corazón,
todos vosotros que esperáis en el Señor.

Salmo 119:10

Con todo mi corazón te he buscado;
No me dejes desviarme de tus mandamientos.
Yo te busco con todo el corazón;
no dejes que me desvíe de tus mandamientos.
Con todo mi corazón te he buscado;
no dejes que me desvíe de tus mandamientos.

Salmo 90:12

Enséñanos de tal modo a contar nuestros días,
Que traigamos al corazón sabiduría.
Enséñanos a contar bien nuestros días,
para que nuestro corazón adquiera sabiduría.
Enséñanos a contar de tal modo nuestros días,
que traigamos al corazón sabiduría.

Salmo 19:14

Sean gratos los dichos de mi boca y la meditación de mi corazón delante de ti,
Oh Jehová, roca mía, y redentor mío.
Sean, pues, aceptables ante ti
mis palabras y mis pensamientos,
oh Señor, roca mía y redentor mío.
Sean gratas las palabras de mi boca y la meditación de mi corazón delante de ti,
oh Señor, roca mía y redentor mío.

Mateo 5:8

Bienaventurados los de limpio corazón,
porque ellos verán a Dios.
Dichosos los de corazón limpio,
porque ellos verán a Dios.
Bienaventurados los de limpio corazón, pues ellos verán a Dios.

Salmo 119:2

Bienaventurados los que guardan sus testimonios,
Y con todo el corazón le buscan.
Dichosos los que guardan sus estatutos
y de todo corazón lo buscan.
¡Cuán bienaventurados son los que guardan sus testimonios,
y con todo el corazón le buscan!

Marcos 11:23

Porque de cierto os digo que cualquiera que dijere a este monte: Quítate y échate en el mar, y no dudare en su corazón, sino creyere que será hecho lo que dice, lo que diga le será hecho.
Les aseguro que, si alguno le dice a este monte: “Quítate de ahí y tírate al mar”, creyendo, sin abrigar la menor duda de que lo que dice sucederá, lo obtendrá.
En verdad os digo que cualquiera que diga a este monte: «Quítate y arrójate al mar», y no dude en su corazón, sino crea que lo que dice va a suceder, le será concedido.

Salmo 119:7

Te alabaré con rectitud de corazón
Cuando aprendiere tus justos juicios.
Te alabaré con integridad de corazón,
cuando aprenda tus justos juicios.
Con rectitud de corazón te daré gracias,
al aprender tus justos juicios.

Josué 22:5

Solamente que con diligencia cuidéis de cumplir el mandamiento y la ley que Moisés siervo de Jehová os ordenó: que améis a Jehová vuestro Dios, y andéis en todos sus caminos; que guardéis sus mandamientos, y le sigáis a él, y le sirváis de todo vuestro corazón y de toda vuestra alma.
Y esfuércense por cumplir fielmente el mandamiento y la ley que les ordenó Moisés, siervo del Señor: amen al Señor su Dios, condúzcanse de acuerdo con su voluntad, obedezcan sus mandamientos, manténganse unidos firmemente a él y sírvanle de todo corazón y con todo su ser.
Solamente guardad cuidadosamente el mandamiento y la ley que Moisés, siervo del Señor, os mandó, de amar al Señor vuestro Dios, andar en todos sus caminos, guardar sus mandamientos y de allegarse a Él y servirle con todo vuestro corazón y con toda vuestra alma.

Eclesiastés 11:10

Quita, pues, de tu corazón el enojo, y aparta de tu carne el mal; porque la adolescencia y la juventud son vanidad.
Aleja de tu corazón el enojo, y echa fuera de tu ser la maldad, porque confiar en la juventud y en la flor de la vida es un absurdo.
Por tanto, aparta de tu corazón la congoja
y aleja el sufrimiento de tu cuerpo,
porque la mocedad y la primavera de la vida son vanidad.

Proverbios 13:12

La esperanza que se demora es tormento del corazón;
Pero árbol de vida es el deseo cumplido.
La esperanza frustrada aflige al corazón;
el deseo cumplido es un árbol de vida.
La esperanza que se demora enferma el corazón,
pero el deseo cumplido es árbol de vida.

Cantares 8:6

Ponme como un sello sobre tu corazón,
como una marca sobre tu brazo;
Porque fuerte es como la muerte el amor;
Duros como el Seol los celos;
Sus brasas, brasas de fuego, fuerte llama.
Grábame como un sello sobre tu corazón;
llévame como una marca sobre tu brazo.
Fuerte es el amor, como la muerte,
y tenaz la pasión, como el sepulcro.
Como llama divina
es el fuego ardiente del amor.
Ponme como sello sobre tu corazón,
como sello sobre tu brazo,
porque fuerte como la muerte es el amor,
inexorables como el Seol, los celos;
sus destellos, destellos de fuego,
la llama misma del Señor.

Proverbios 12:25

La congoja en el corazón del hombre lo abate;
Mas la buena palabra lo alegra.
La angustia abate el corazón del hombre,
pero una palabra amable lo alegra.
La ansiedad en el corazón del hombre lo deprime,
mas la buena palabra lo alegra.

Salmo 119:11

En mi corazón he guardado tus dichos,
Para no pecar contra ti.
En mi corazón atesoro tus dichos
para no pecar contra ti.
En mi corazón he atesorado tu palabra,
para no pecar contra ti.

Romanos 5:5

Y la esperanza no avergüenza; porque el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos fue dado.
Y esta esperanza no nos defrauda, porque Dios ha derramado su amor en nuestro corazón por el Espíritu Santo que nos ha dado.
Y la esperanza no desilusiona, porque el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por medio del Espíritu Santo que nos fue dado.

Eclesiastés 9:7

Anda, y come tu pan con gozo, y bebe tu vino con alegre corazón; porque tus obras ya son agradables a Dios.
¡Anda, come tu pan con alegría! ¡Bebe tu vino con buen ánimo, que Dios ya se ha agradado de tus obras!
Vete, come tu pan con gozo,
y bebe tu vino con corazón alegre,
porque Dios ya ha aprobado tus obras.

Salmo 119:111

Por heredad he tomado tus testimonios para siempre,
Porque son el gozo de mi corazón.
Tus estatutos son mi herencia permanente;
son el regocijo de mi corazón.
Tus testimonios he tomado como herencia para siempre,
porque son el gozo de mi corazón.

Hebreos 3:12

Mirad, hermanos, que no haya en ninguno de vosotros corazón malo de incredulidad para apartarse del Dios vivo.
Cuídense, hermanos, de que ninguno de ustedes tenga un corazón pecaminoso e incrédulo que los haga apartarse del Dios vivo.
Tened cuidado, hermanos, no sea que en alguno de vosotros haya un corazón malo de incredulidad, para apartarse del Dios vivo.

Salmo 13:5-6

Mas yo en tu misericordia he confiado;
Mi corazón se alegrará en tu salvación.
Cantaré a Jehová,
Porque me ha hecho bien.
Pero yo confío en tu gran amor;
mi corazón se alegra en tu salvación.
Canto salmos al Señor.
¡El Señor ha sido bueno conmigo!
Mas yo en tu misericordia he confiado;
mi corazón se regocijará en tu salvación.
Cantaré al Señor,
porque me ha colmado de bienes.

Joel 2:13

Rasgad vuestro corazón, y no vuestros vestidos,
y convertíos a Jehová vuestro Dios;
porque misericordioso es y clemente,
tardo para la ira y grande en misericordia,
y que se duele del castigo.
Rásguense el corazón
y no las vestiduras.
Vuélvanse al Señor su Dios,
porque él es bondadoso y compasivo,
lento para la ira y lleno de amor,
cambia de parecer y no castiga.
Rasgad vuestro corazón y no vuestros vestidos;
volved ahora al Señor vuestro Dios,
porque Él es compasivo y clemente,
lento para la ira, abundante en misericordia,
y se arrepiente de infligir el mal.

Proverbios 4:20-21

Hijo mío, está atento a mis palabras;
Inclina tu oído a mis razones.
No se aparten de tus ojos;
Guárdalas en medio de tu corazón.
Hijo mío, atiende a mis consejos;
escucha atentamente lo que digo.
No pierdas de vista mis palabras;
guárdalas muy dentro de tu corazón.
Hijo mío, presta atención a mis palabras,
inclina tu oído a mis razones;
que no se aparten de tus ojos,
guárdalas en medio de tu corazón.

Joel 2:12

Por eso pues, ahora, dice Jehová,
convertíos a mí
con todo vuestro corazón,
con ayuno y lloro y lamento.
Ahora bien —afirma el Señor—,
vuélvanse a mí de todo corazón,
con ayuno, llantos y lamentos.
Aun ahora —declara el Señor—
volved a mí de todo corazón,
con ayuno, llanto y lamento.

Proverbios 23:15

Hijo mío, si tu corazón fuere sabio,
También a mí se me alegrará el corazón.
Hijo mío, si tu corazón es sabio,
también mi corazón se regocijará.
Hijo mío, si tu corazón es sabio,
mi corazón también se me alegrará.

Salmo 86:11

Enséñame, oh Jehová, tu camino; caminaré yo en tu verdad;
Afirma mi corazón para que tema tu nombre.
Instrúyeme, Señor, en tu camino
para conducirme con fidelidad.
Dame integridad de corazón
para temer tu nombre.
Enséñame, oh Señor, tu camino;
andaré en tu verdad;
unifica mi corazón para que tema tu nombre.

Salmo 119:36

Inclina mi corazón a tus testimonios,
Y no a la avaricia.
Inclina mi corazón hacia tus estatutos
y no hacia las ganancias desmedidas.
Inclina mi corazón a tus testimonios
y no a la ganancia deshonesta.

Salmo 9:1

Te alabaré, oh Jehová, con todo mi corazón;
Contaré todas tus maravillas.
Quiero alabarte, Señor, con todo el corazón,
y contar todas tus maravillas.
Alabaré al Señor con todo mi corazón.
Todas tus maravillas contaré.

Salmo 27:3

Aunque un ejército acampe contra mí,
No temerá mi corazón;
Aunque contra mí se levante guerra,
Yo estaré confiado.
Aun cuando un ejército me asedie,
no temerá mi corazón;
aun cuando una guerra estalle contra mí,
yo mantendré la confianza.
Aunque un ejército acampe contra mí,
no temerá mi corazón;
aunque en mi contra se levante guerra,
a pesar de ello, estaré confiado.

Mateo 5:27-28

Oísteis que fue dicho: No cometerás adulterio. Pero yo os digo que cualquiera que mira a una mujer para codiciarla, ya adulteró con ella en su corazón.
Ustedes han oído que se dijo: “No cometas adulterio”. Pero yo les digo que cualquiera que mira a una mujer y la codicia ya ha cometido adulterio con ella en el corazón.
Habéis oído que se dijo: «No cometerás adulterio». Pero yo os digo que todo el que mire a una mujer para codiciarla ya cometió adulterio con ella en su corazón.

Josué 23:14

Y he aquí que yo estoy para entrar hoy por el camino de toda la tierra; reconoced, pues, con todo vuestro corazón y con toda vuestra alma, que no ha faltado una palabra de todas las buenas palabras que Jehová vuestro Dios había dicho de vosotros; todas os han acontecido, no ha faltado ninguna de ellas.
Por mi parte, yo estoy a punto de ir por el camino que todo mortal transita. Ustedes bien saben que ninguna de las buenas promesas del Señor su Dios ha dejado de cumplirse al pie de la letra. Todas se han hecho realidad, pues él no ha faltado a ninguna de ellas.
He aquí, hoy me voy por el camino de toda la tierra, y vosotros sabéis con todo vuestro corazón y con toda vuestra alma que ninguna de las buenas palabras que el Señor vuestro Dios habló acerca de vosotros ha faltado; todas os han sido cumplidas, ninguna de ellas ha faltado.

Salmo 62:6

El solamente es mi roca y mi salvación.
Es mi refugio, no resbalaré.
Solo él es mi roca y mi salvación;
él es mi protector
y no habré de caer.
Solo Él es mi roca y mi salvación,
mi refugio, nunca seré sacudido.

Salmo 19:8

Los mandamientos de Jehová son rectos, que alegran el corazón;
El precepto de Jehová es puro, que alumbra los ojos.
Los preceptos del Señor son rectos:
traen alegría al corazón.
El mandamiento del Señor es claro:
da luz a los ojos.
Los preceptos del Señor son rectos, que alegran el corazón;
el mandamiento del Señor es puro, que alumbra los ojos.

1 Samuel 12:24

Solamente temed a Jehová y servidle de verdad con todo vuestro corazón, pues considerad cuán grandes cosas ha hecho por vosotros.
Pero los exhorto a temer al Señor y a servirle fielmente y de todo corazón, recordando los grandes beneficios que él ha hecho en favor de ustedes.
Solamente temed al Señor y servidle en verdad con todo vuestro corazón; pues habéis visto cuán grandes cosas ha hecho por vosotros.

Marcos 7:18-19

El les dijo: ¿También vosotros estáis así sin entendimiento? ¿No entendéis que todo lo de fuera que entra en el hombre, no le puede contaminar, porque no entra en su corazón, sino en el vientre, y sale a la letrina? Esto decía, haciendo limpios todos los alimentos.
¿Tampoco ustedes pueden entenderlo? —les dijo—. ¿No se dan cuenta de que nada de lo que entra en una persona puede contaminarla? Porque no entra en su corazón, sino en su estómago, y después va a dar a la letrina. Con esto Jesús declaraba limpios todos los alimentos.
Y Él les dijo: ¿También vosotros sois tan faltos de entendimiento? ¿No comprendéis que todo lo que de afuera entra al hombre no le puede contaminar, porque no entra en su corazón, sino en el estómago, y se elimina? (Declarando así limpios todos los alimentos.)

Marcos 12:33

Y el amarle con todo el corazón, con todo el entendimiento, con toda el alma, y con todas las fuerzas, y amar al prójimo como a uno mismo, es más que todos los holocaustos y sacrificios.
Amarlo con todo el corazón, con todo el entendimiento y con todas las fuerzas, y amar al prójimo como a uno mismo, es más importante que todos los holocaustos y sacrificios.
Y que amarle con todo el corazón y con todo el entendimiento y con todas las fuerzas, y amar al prójimo como a uno mismo, es más que todos los holocaustos y los sacrificios.

Josué 24:23

Quitad, pues, ahora los dioses ajenos que están entre vosotros, e inclinad vuestro corazón a Jehová Dios de Israel.
Josué replicó: —Desháganse de los dioses ajenos que todavía conservan. ¡Vuélvanse de todo corazón al Señor, Dios de Israel!
Ahora pues, quitad los dioses extranjeros que están en medio de vosotros, e inclinad vuestro corazón al Señor, Dios de Israel.

Deja un comentario